Espíritus sabios y benévolos, mensajeros de Dios, cuya misión es la de asistir a los hombres y conducirles por el buen camino; sostenganme en las pruebas de esta vida, denme fuerzas para sufrirlas sin murmurar, desvíen de mí los malos pensamientos y hagan que no dé acceso a ninguno de los malos Espíritus que intenten inducirme al mal, iluminen mi conciencia para que pueda ver mis defectos, separen de mis ojos el velo del orgullo, que podría impedirme verlos a ustedes…
Tu mi ángel de la guarda, que velas por mi particularmente, Espíritus protectores que se interesan por mí, háganme digno de su benevolencia.
Ya ustedes conocen mis necesidades, que sean satisfechas según la voluntad de Dios.
Amén
Al final se recomienda realizar 3 padre nuestros
Esta oración la conseguí de unos apuntes de mi abuela (Venezuela)